Enseñanzas de la Jala

La Experiencia maravillosa de la mujer hebrea, es la beraja de realizar el mitzvah de hacer el Jala. A aquellas que la realizan cada semana  y a aquellas mujeres virtuosas que quisieran hacerlo pero que por algún motivo no lo han logrado hacer, a través de este segmento les invito a esforzarse a realizarlo y así ser participe de esta gran experiencia. Ya que a través de este mitzvah hacemos el ejad con todo nuestro pueblo, el pueblo de Israel. Sin importar en donde  habitemos, ya sea en eretz Israel o fuera (diáspora), esta mitzvah se realiza de generación en generación.
   
La importancia de obedecer la mitzvah de la Jala es que nos eleva de lo físico y mundano a un nivel espiritual inimaginable. Que a través de ello recordamos las ofrendas que se presentaban en el Beit Hamikdash cuando aun estaba en pie, y a la vez declaramos nuestra creencia que todo nuestro sustento proviene directamente de la mano de Yahweh y asimismo garantizamos la abundancia del pan en nuestras mesas a través de nuestras generaciones.

Bamidbar 15:20-21 “Deberán separar la primera porción de toda masa como ofrenda de Jala, debe separarse tal como la ofrenda de los cereales. De toda masa que preparen, deberán ofrecer a Ado-nai una ofrenda Teruma en todas vuestras generaciones.”

La palabra hebrea Jala es utilizada generalmente para el pan trenzado que forma la base de la comida del sagrado Shabat, pero en su significado halajico Jala es el trocito de masa que se separa y se consagra a Ado-nai cada vez que realizamos el mitzvah.

Sin dejar fuera la importancia de saber como prepararlo lo mejor posible, también es muy importante tener buenos utensilios, de acuerdo a nuestras posibilidades,  para el uso exclusivo de la preparación del Jala. En algunos escritos se comenta que aunque la mujer no sepa cocinar lo suficientemente bien pero si sabe hacer el Jala, es una mujer calificada. Así que por lo tanto les insto a todas las mujeres judías al cumplimiento de este mitzvah por el bienestar de todas las familias de Israel.